A pesar de que en las últimas semanas ha habido rumores de que
el Ministerio de Justicia retrasaba la aprobación del anteproyecto de reforma
completa de la LOPJ hasta después de las elecciones europeas de finales de mayo
para no propiciar más conflictos que se derivan de su contenido muy agresivo, es
más que probable que el Consejo de Ministros del próximo viernes 28 de marzo,
apruebe el anteproyecto de reforma de la LOPJ.
Esta reforma cuyo anteproyecto aprobará el Gobierno sigue sin
ser entregada a las organizaciones sindicales por decisión expresa del ministro
de Justicia y del secretario de Estado de Justicia, que se han negado a recibirnos y a contestar
a las numerosas cartas que CCOO le ha remitido
desde hace meses. La desvergüenza de estos máximos responsables del Ministerio
de Justicia llega a no permitir el acceso al Ministerio de Justicia a los
delegados sindicales para no tener que recibirlos.
CCOO no
va a tolerar que un proyecto que reforma la Administración de Justicia en su
integridad, que pretende modificar toda la
estructura actual de la misma, y que contiene elementos sustanciales y
objetivos que modifican las condiciones de trabajo del personal al servicio de
la Administración de Justicia, se
imponga unilateralmente.
CCOO exige de nuevo al ministro de
Justicia la negociación de todo el texto en la mesa sectorial, porque en el mismo se van a recoger
modificaciones tan profundas que van a cambiar nuestras condiciones de trabajo,
que si no se rectifica, obligarán a CCOO a convocar las
movilizaciones más contundentes, solicitando en ellas la participación masiva
de los trabajadores y trabajadoras de la Administración de Justicia.
Si el texto del anteproyecto de reforma de la LOPJ que
apruebe el consejo de ministros mantiene
la decisión del Ministerio de Justicia de eliminar los Juzgados de Paz y Agrupaciones de Juzgados
de Paz, las Audiencias Provinciales y la inmensa mayoría de los partidos
judiciales y órganos judiciales, al convertir los Tribunales de Instancia en órganos de ámbito
provincial y con subsedes solo en algunas localidades, decididas por el
Ministerio o por las CCAA, que eliminará en la práctica miles de
puestos de trabajo y obligará a los trabajadores a desplazarse de su localidad
de forma obligatoria, y al mismo tiempo eliminará la concepción
de los centros de trabajo actuales por un nuevo tipo de destino que sería la
provincia y no el órgano judicial, estaríamos asistiendo a una escalada de
agresiones de tal calado que solo pueden tener la máxima y contundente
respuesta de la movilización de miles de trabajadores de la Administración de
Justicia.
CCOO lleva advirtiendo desde hace más de un
año de que esta reforma iba a llegar e informábamos de sus gravísimos
contenidos. Porque Gallardón no ha parado en su escalada de agresiones a los
trabajadores de la Administración de Justicia y a la ciudadanía: primero,
fueron las tasas judiciales, después insistió en la privatización de los
registros civiles, proyecto que no ha abandonado, ahora aprobará la reforma de
la LOPJ. Si no queremos permitir un desastre para el empleo y para las
condiciones de trabajo del personal de la Administración de Justicia, debemos preparar la respuesta, que debe ser contundente
y de largo recorrido.
Porque estamos asistiendo a la mayor agresión que el personal de
la Administración de Justicia ha tenido en su historia, y no debemos
consentirlo.
CCOO ya ha
advertido al ministro de Justicia y al secretario de Estado de Justicia de que
no vamos a quedarnos con los brazos cruzados ante esta enorme agresión.
Si finalmente, es aprobado el anteproyecto de reforma de la LOPJ
por el consejo de ministros, el Ministerio de Justicia comenzará pidiendo los
informes preceptivos, entre otros al Consejo de Estado y al CGPJ, para una vez
recibidos todos, aprobar en segunda vuelta, ya en fase de proyecto dicha
reforma, que a partir de ese momento el Gobierno remitiría al Congreso de los
Diputados para su debate y aprobación como Ley. Por tanto, con este calendario,
CCOO
considera imprescindible preparar desde ahora la movilización para poder frenar
el deterioro de las condiciones de trabajo del personal de la Administración de
Justicia. Y las movilizaciones deben ser lo más unitarias posibles de
trabajadores y organizaciones que verdaderamente estén dispuestas a defender
con la máxima firmeza los derechos del personal de la Administración de
Justicia.
NO PERMITAMOS EL CIERRE DE NINGÚN JUZGADO
NO CONSINTAMOS LA AMORTIZACIÓN DE NINGÚN PUESTO DE TRABAJO
NO PERMITAMOS DESTRUCCIÓN DE NINGÚN EMPLEO
NO TOLEREMOS LA DESTRUCCIÓN DE NINGÚN ÓRGANO JUDICIAL
¡¡VAMOS A CAMBIAR
LAS COSAS!!
UTILIZA TU FUERZA
¡¡MOVILIZATE Y LUCHA!!